Pequeños conflictos pueden desatar grandes problemas, como esta pareja que discutió por las dos últimas papas fritas de una hamburguesa y casi termina en una tragedia. Aunque pueda parecer trivial, la reacción fue desmedida e incontrolable.
La relación entre los dos enamorados ya no parecía estar en su mejor momento, ya que Matthew Finn narró cómo, luego de que su novia terminara de comer su hamburguesa y la mayor parte de las papas, decidió tomar las últimas dos sin imaginar que ella lo tildaría de ladrón.
Al comerse las últimas papas, su novia, Charlotte Harrison, estalló en ira, exigiéndole que bajara del auto de inmediato. El joven, algo confundido, obedeció y empezó a alejarse caminando por la acera. Sin embargo, pronto notó que el vehículo lo seguía.
La situación se agravó cuando el auto no solo lo seguía, sino que aceleró de manera peligrosa, como un piloto de Fórmula 1. Por suerte, el vehículo no impactó al joven, pero sí terminó estrellándose contra una pared y quedó inutilizado.
«Tenía una papa, ella se detuvo y me pidió que saliera del auto. Pensé que estaba terminado. Sí, no debería haber pedido esa papa», dijo el joven.
Por este incidente, Charlotte fue arrestada y ahora se espera que se esclarezcan los hechos. Aunque a simple vista parece un intento de asesinato, la mujer lo niega rotundamente, argumentando que confundió los pedales, algo que puede suceder cuando se está alterado al volante.
El testimonio de Charlotte es que ella llevaba a Mathew al hospital, pero este comenzó a molestarla y agredirla, por lo que ella lo hizo bajar del auto. Al intentar dar vuelta en U para presentar una denuncia en su contra por agresión, perdió el control del vehículo. Así lo explicó su abogado:
«Ella lo vio salir corriendo, intentó hacer un giro en U para ir a la Comisaría de Policía de Norwood para denunciarlo. Ella, por error, pisó el acelerador en lugar del freno y luego golpeó el poste como se describe en las imágenes de CCTV».