Jackie Chan es uno de los actores más populares y reconocidos en el mundo. Conocido por sus habilidades marciales impresionantes y su sentido del humor, ha conquistado el corazón de millones. Sin embargo, en 2018, su publicación de memorias reveló sorprendentes detalles que nos dejaron atónitos.
Antes que nada, es importante destacar que Jackie Chan, de 68 años, ha participado en más de 150 películas y ha acumulado una fortuna de 400 millones de dólares. Sin embargo, Jackie ha revelado que no tiene intención de dejarle nada a su hijo Jaycee Chan, de 40 años, ya que quiere que tenga que luchar y construir su propio futuro.
Por eso, el actor principal de «Rob-B-Hood» ha confesado que su patrimonio será donado a obras de caridad, como ha sido su práctica a lo largo de su vida. Según sus palabras, como también director, si su hijo logra acumular su propia fortuna, significará que es capaz de alcanzar el éxito bajo su propio nombre.
Si es competente, puede generar su propia riqueza. Si no lo es, estaría desperdiciando mi fortuna.
La motivación detrás de esta decisión no es que el artista marcial sea tacaño o demasiado estricto, sino que proviene de su propia experiencia en la juventud. En su libro «Never Grow Up», confesó que durante su ascenso a la fama cayó en la adicción al alcohol, drogas, prostitución e incluso en la violencia doméstica.
El actor de dobles de acción de Hong Kong cuenta que, al haber crecido en la extrema pobreza, cuando finalmente tuvo acceso a todos los lujos que la fama le ofrecía, no sabía cómo manejarlos. El rencor hacia su infancia y juventud lo llevó a caer en excesos y a creer que viviendo de esa manera podría demostrar su valía.
Después de alcanzar el fondo, Jackie Chan decidió cambiar su vida y ahora está seguro de que Jaycee debe esforzarse por construir su propio futuro, para evitar caer en un camino parecido al que él mismo experimentó.